Del sueño a la pesadilla

Y es que el Tenerife, como siempre, le toca sufrir, aunque el partido de este fin de semana no tuviera esa materialización tan certera que en la temporada del ascenso tenía y que en las dos ultimas campañas se ha esfumado como por arte de magia.
El partido de ayer frente al Salamanca terminó con un 1-2 en el marcador, y, podría decir que fue injusto, peor es que los fallo, aunque sean mínimos tambien cuentan en la valoración.
El primer gol fue favorable a los blanquiazules tras rematar Natalio un balón rechazado por el portero visitante. Así se llegó al descanso, donde el Salamanca aprovechó un despiste defensivo para empatar. A diez minutos del final los insulares se quedaban con 10 jugadores tras la expulsión de David Prieto por segunda  amarilla, ya en el tiempo añadido lo visitantes marcaron el gol del triunfo en una contra.